El pasado 16 de octubre, nos recibió D. Braulio para hablar sobre los padres objetores en la provincia y lo grave de Educacion para la ciudadanía. Le llevamos varias informaciones importantes, y una de ellas era el convenio entre CEAPA y FELGTB (lease federacion de estatal de lesbianas, gay,transexuales, y bisexuales). Le sorprendió mucho. Ya ha publicado una carta sobre este tema y llamando la atención a los padres para que estén atentos. La trancribo en el blog para darle difusion. En la foto, las plataformas Toledana con D. Braulio.
Tengo en mis manos un convenio de colaboración entre la Federación estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales y la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), firmado en Madrid el 8 de octubre del año en curso. No está mal la colaboración en forma de convenios. Lo que llama la atención es lo que ambas entidades exponen como principios, pues hablan de unos temas en los que parece que hay un absoluto consenso en la sociedad española. Claro está que los derechos de todos los españoles han de ser equiparados en sus derechos civiles, y es bueno erradicar todo comportamiento discriminatorio y sexista en la escuela. Pero todos, también los que juzgan que, si muchos millones de ciudadanos no están de acuerdo con una ley, éstos son reaccionarios y anticonstitucionales. La ideología de género es algo que en la sociedad española ha sido programado para que sean aceptados sus postulados porque sí, porque es «progresista» y científico.
Y hay muchos millones de españoles que no estamos de acuerdo con esa visión del hombre y la mujer. Tampoco estamos de acuerdo con que se llame matrimonio a la unión afectiva de personas
del mismo sexo, pese a haber sido votado por el Parlamento. ¿No somos por ello democráticos?
¿Acaso somos homófobos? En absoluto. No queremos discriminar, pero tampoco que se nos discrimine. Entendemos los posibles problemas que puedan tener los padres y madres gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, y les respetamos, pero ese Convenio de colaboración no debe llegar al ámbito educativo presentando las cosas sólo desde un punto de vista y además obligatorio. Bastante es que tengamos que sufrir como legal la obligatoriedad de Educación para la Ciudadanía como asignatura, con el contenido que tiene en los Reales Decretos de la LOE, que ha dado lugar a libros de textos nefastos y tendenciosos. Bastante tienen que soportar los padres que objetan contra EpC para que el Estado/Gobierno no entre donde no debe entrar: en su educación moral de los hijos de los ciudadanos. Este convenio expone «que hay que impulsar la educación afectivo-sexual en los centros educativos, ya que en la actualidad apenas se imparte». ¿Qué tipo de educación afectivo-sexual? ¿La que, por desgracia, impulsan algunos funcionarios de Consejerías hartamente discutidas y reduccionistas? Ya conocemos esa des-educación afectivo-sexual que está a la base de un concepto de hombre y mujer muy discutido y que no tiene porque ser única y discriminatoria. ¿Qué se esconde detrás de la frase «que los centros educativos deben educar a los menores (…) con diversos recursos sobre la orientación sexual?»
Podrán suscribir ambas organizaciones cuantos convenios-marco deseen para sus respectivas actuaciones, pero que los padres que nada tienen que ver con CEAPA estén atentos por si esas actividades invaden el ámbito de la escuela de forma obligatoria.
Ningún Consejo Escolar, ningún director o directora de centro escolar tiene competencias para que en la escuela se impartan enseñanzas obligatorias que los padres no quieren para sus hijos.
D. BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Y hay muchos millones de españoles que no estamos de acuerdo con esa visión del hombre y la mujer. Tampoco estamos de acuerdo con que se llame matrimonio a la unión afectiva de personas
del mismo sexo, pese a haber sido votado por el Parlamento. ¿No somos por ello democráticos?
¿Acaso somos homófobos? En absoluto. No queremos discriminar, pero tampoco que se nos discrimine. Entendemos los posibles problemas que puedan tener los padres y madres gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, y les respetamos, pero ese Convenio de colaboración no debe llegar al ámbito educativo presentando las cosas sólo desde un punto de vista y además obligatorio. Bastante es que tengamos que sufrir como legal la obligatoriedad de Educación para la Ciudadanía como asignatura, con el contenido que tiene en los Reales Decretos de la LOE, que ha dado lugar a libros de textos nefastos y tendenciosos. Bastante tienen que soportar los padres que objetan contra EpC para que el Estado/Gobierno no entre donde no debe entrar: en su educación moral de los hijos de los ciudadanos. Este convenio expone «que hay que impulsar la educación afectivo-sexual en los centros educativos, ya que en la actualidad apenas se imparte». ¿Qué tipo de educación afectivo-sexual? ¿La que, por desgracia, impulsan algunos funcionarios de Consejerías hartamente discutidas y reduccionistas? Ya conocemos esa des-educación afectivo-sexual que está a la base de un concepto de hombre y mujer muy discutido y que no tiene porque ser única y discriminatoria. ¿Qué se esconde detrás de la frase «que los centros educativos deben educar a los menores (…) con diversos recursos sobre la orientación sexual?»
Podrán suscribir ambas organizaciones cuantos convenios-marco deseen para sus respectivas actuaciones, pero que los padres que nada tienen que ver con CEAPA estén atentos por si esas actividades invaden el ámbito de la escuela de forma obligatoria.
Ningún Consejo Escolar, ningún director o directora de centro escolar tiene competencias para que en la escuela se impartan enseñanzas obligatorias que los padres no quieren para sus hijos.
D. BRAULIO RODRÍGUEZ PLAZA
Arzobispo de Toledo
Primado de España
Hola!
ResponderEliminarNavengado por la red, sobre el tema del aborto he llegado a este blog. Comparto la idea de que no esta justificado el aborto, (y menos que esa deicisión se tome con 16 años), sin embargo, en situaciones de riesgo de salud, para hijo y/o madre si que estoy 100% de acuerdo que se dé la opción.
Explicado este punto de vista, me gustaría contarle, permítame la expresión, "un poco de mi vida"
Soy un chico estudiante de informática, tengo 22 años, vivo en una familia de clase media. Tengo un hermano mayor, que vive con su novia (próximamente se casarán), por lo que en casa quedamos mi padre, mi madre y yo. Soy muy responsable y querido en mi pueblo, y sin que suene poco humilde, le diré que mis padres estan muy orgullosos de mi.
Hace años que mantengo relaciones con chicos, desde los 17 o 18 años. Sinceramente no me pregunte porque, pero a pesar de haber tenido varias novias en mi vida, no me terminan de gustar. Antes de nada proseguir, le diré que no voy a manifestaciones gays, ni voy "disfrazado" por la calle ni nada parecido. Usted podría ser perfectamente mi vecina y jamás pensaría que soy gay.
Mis padres no lo saben, y obviamente lo que me aterroriza es que dejen de quererme y tenga problemas familiares con ellos. Ese es mi principal problema, es la confianza que hay en casa, donde todo se habla, y se busca solución. La cercanía de mis padres en mi vida, que siempre buscan lo mejor para mi, y que nunca me han hecho de mentirles en nada. Lo que no me deja dormir la mitad de las noches y es el miedo a hacer daño a las personas que mas quiero.
Ahora le pregunto a usted lo siguiente...
a) ¿Es culpa de mis padres?.. le diré de antemano que no, ya le he dicho que procedo de una familia estable, respetuosa y ordenada
b) ¿Es culpa mía?.. ¿de que?.. ¿por qué?
c) Si me rechazaran... ¿usted no lo vería injusto? Yo si y mucho. Sigo siendo el mismo hijo, solo que ahora saben algo mas.
d) ¿No cree usted que merezco que mis padres me quieran igualmente y que nadie me mire mal?
De verdad, no le deseo a nadie estar en mi situación, y cuando usted lee en informes/periódicos que los chicos gays, sufren trastornos de auto-estima, le digo yo que la culpa no la tienen ellos, la tienen los padres, amigos, entorno.. que lo juzgan antes de abrir la boca para poder explicarse.
Quiero terminar este texto, pidiéndole que nos ayuden a poder vivir sin un dedo señalándonos todos los días. Es triste mentir (como miento a diario), sobre escapadas de fin de semana para justificar que he ido a ver a mi chico, porque no me duele querer a un chico, me duele mentir a las personas que mas quiero, por miedo a un rechazo. Un rechazo que se escapa de mi concepto racional.
Disculpeme por camuflarme en el anonimato de la red, puesto que no voy a colocar mi nombre, ni ninguna seña, le pido que si lo ve oportuno, me responda aqui mismo. Asi mismo, reciba un cordial saludo.
Hola, gracias por escribir en mi blog, como habrás visto soy madre de cuatro hijos, y uno de ellos tiene tu edad. Lo primero que quería decirte es que los padres queremos a los hijos siempre, aunque no os lo creáis.
ResponderEliminarSiento mucho que no puedas dormir tranquilamente, y que sufras por esta situación, como dices de mentir a diario. Tiene que ser realmente muy duro para ti. Te advierto que no soy ninguna sexóloga, solo soy una ama de casa y madre de familia. (El titulo del blog lo dice bien claro), es mas, no tengo ni siquiera estudios universitarios.
Mira, yo conocí a mi marido siendo muy joven y nos enamoramos. Pero eso no justificaba tener relaciones sexuales. El enamoramiento lleva consigo también una serie de caminos, etapas, que no se deben adelantar. Por tanto, cuando decidimos que nuestra relación fuera una verdadera entrega, el uno para el otro, hicimos manifiesto nuestro compromiso bajo un sacramento, el del matrimonio. ¿Eres creyente? Nosotros si. Te digo esto porque el Amor es algo maravilloso, y las relaciones entre un hombre y una mujer que se aman están abiertas a la vida, a la continuación de la creación de Dios. En pocas palabras, yo no voy a juzgar nunca tu forma de vida, solo te cuento la que yo tengo, y la que trato de enseñar a mis hijos. Hoy muchas personas ven el sexo como una expresión de placer que no hay que privarse. “darle gusto al cuerpo”, pero esto trae consecuencias negativas para la persona, ya que no estamos hechos para ser egoístas.
Me preguntas que quien tiene la culpa, que sería injusto que te rechazaran.. Pues claro, yo nunca rechazaría un hijo, pero si hablaría mucho sobre que le ha llevado a esa situación. Tu mismo dices que no lo sabes bien. No es cuestión de culpas, para mi, es un camino equivocado, que no te llevará a realizarte como hombre, al igual que si fueras un chico que mantiene relaciones con muchas chicas distintas tampoco aprobaría ese camino. No es tanto que seas homosexual, es que has optado por vivir la sexualidad incompleta, ya que para mi, el sexo esta intrínsecamente unido al Amor conyugal, un amor que perdura, que es entrega, que admite la llegada de los hijos, que funda una familia…
Te cuento que cada día compro la fruta en el mismo sitio, y el frutero es homosexual. Le aprecio mucho, le conozco desde que era adolescente. No le juzgo, no le señalo con el dedo, y menos le rechazo. Eso si, no acepto su forma de vida, y rechazo que su forma de entender el amor, pero eso no impide que vea en él a una persona digna, un ser creado por amor y al que debo todo mi respeto y cariño. ¿Me explico? El sabe perfectamente mi forma de pensar, y también me respeta.
No se si te he ayudado, pero me parecía oportuno contestarte, sólo que he estado de viaje y lo he leído hoy.
Por cierto, la carrera que haces es dura, y con la cantidad de prácticas que tendrás que hacer no es bueno que pases noches sin dormir. Cuídate, un saludo afectuoso, Mariaje